lunes, 16 de febrero de 2009

La educación preescolar es más importante de lo que normalmente se cree, pero ha crecido a la sombra de la educación primaria y las educadoras y educadores no hemos hecho lo suficiente para modificar esta situación.
El Programa de Educación Preescolar 2004, menciona: "...son comunes los prejuicios y las expectativas infundadas en torno a él (al nivel preescolar), desde considerar que los niños sólo van a jugar, hasta esperar a que anticipe mecánicamente tareas de la escuela primaria" (SEP, 2004).
En no pocas ocasiones los esfuerzos del personal de los Jardines de Niños se concreta a la realización de juntas informativas en donde se intenta convencer a los padres de familia de algo que no ven realmente. Si ellos piensan que al Jardín nada más van los niños a jugar, hagamos jugar a los tutores, pero de tal manera que ellos puedan aprender algo a través de esta estrategia.
Ahí es donde deben conjugarse la creatividad, la investigación, la lógica y el liderazgo de la educadora. Todo un reto.
Si a usted le ofrecieran un perfume, pero el vendedor, en vez de enseñarle el producto nada más le habla de sus bondades y virtudes, ¿usted lo compraría?. Pongáse un momento en el papel de los padres y madres de familia, su visión no cambiará mientras no experimente en carne propia la eficacia del juego en la educación infantil. Entonces haga jugar a los papás, haga que disfruten y aprendan al mismo tiempo.