sábado, 22 de enero de 2011

La apreciación musical

El Programa de Educación Preescolar 2004, específicamente en el aspecto dedicado a la música, resulta interesante, ya que además de contemplar la expresión, también hace énfasis en la apreciación de la misma.

Esto da pie a que se pueda realizar una serie de reflexiones; por ejemplo:

En muchas ocasiones, se piensa que la creatividad surge de la nada y que, entonces, al dejar al niño hacer libremente estamos promoviendo el que sea creativo. Este es un error, ya que no debemos caer en los extremos. No debemos olvidar que un niño, con 4, 5 o 6 años a cuestas, tiene muchísima menos experiencia que nosotros los adultos; su acervo musical todavía es limitado, está en formación. Nuestra labor docente no concluye con el dejar hacer, si no que comienza con el fomentar la exploración.

Ubicados en nuestro contexto, podremos encontrar que los niños (generalmente) escuchan y prefieren la música comercial, la música de banda, la de reguetón; esto es natural debido a que diariamente es bombardeado con este tipo de producciones musicales, en la radio, en la televisión, por que los hermanos mayores o los adultos es lo que escuchan. Es obvio también que si le preguntamos a un niño en el jardín qué quiere cantar existe la enorme posibilidad que utilice sus referencias más cercanas.

La intervención docente radica, entre otras cosas, en brindar al niño la posibilidad de enriquecer la gama de opciones, creando un espacio de audición, espacio no solamente físico, para que él pueda interesarse paulatinamente en escuchar algo más de lo que cotidianamente oye.

Si en nuestras aulas creamos una biblioteca, por qué no hacer una audioteca. Necesitamos para ello contar con un equipo de sonido, puede ser una pequeña grabadora a la cual habría que dotarla de un par de buenas bocinas (la calidad es básica). Este tipo de equipos son accesibles a la mayoría de docentes. Un accesorio imprescindible es un par de audífonos, por que habrá momentos en que algún niño quiera escuchar alguna obra musical sin interrumpir al resto del grupo.

Enseguida restará conseguir música de diversos géneros, desde la música folklórica de varios países hasta la música culta, también llamada, erróneamente, clásica.